Una organización holandesa acaba de anunciar planes para salvar la contaminación plástica del océano y usarla para construir carreteras en Rotterdam.
La solución es bastante simple: VolkerWessels, la compañía que lidera el proyecto, planea reunir los materiales mediante la instalación de barricadas en las aguas cercanas al mar. Los plásticos serán transportados, procesados y comprimidos en bloques de construcción para las carreteras.
Más allá de su beneficio para el planeta, el material crudo reciclado utilizado para el proyecto PlasticRoad es más duradero y más fácil de manipular y mantener.
Los estudios sugieren que se puede usar casi cualquier tipo de plástico, y el material es resistente a la variación de temperatura de -40º a 176º Fahrenheit (-40º a 80ºC).
Los científicos ya están en las etapas finales de las pruebas de seguridad del material, y si los planes se realizan de acuerdo con lo programado, las primeras carreteras se construirán a finales de este año.