Un poco más de una década es todo lo que queda para detener el daño irreversible del cambio climático, escucharon hoy los líderes mundiales cuando la Asamblea General inauguró una reunión de alto nivel sobre la relación entre el fenómeno y el desarrollo sostenible.
La reunión, celebrada de conformidad con la resolución 72/219 (2017) de la Asamblea General, se desarrollará hasta el 29 de marzo con un enfoque en la protección del clima global para las generaciones presentes y futuras, en el contexto de las dimensiones económica, social y ambiental de 2030. Agenda para el Desarrollo Sostenible.
“Somos la última generación que puede prevenir daños irreparables a nuestro planeta”, advirtió la presidenta de la Asamblea General, María Fernanda Espinosa Garcés (Ecuador), en su discurso de apertura, e hizo hincapié en que solo faltan 11 años para evitar una catástrofe. Destacando el tema de la reunión, la Sra. Espinosa pidió un enfoque intergeneracional para el cambio climático. “La justicia climática es la justicia intergeneracional”, dijo, y pidió a los Estados que actúen de manera colectiva y responsable.
Señalando los llamamientos intensificados de los líderes juveniles para la acción contra el cambio climático, dijo que 2019 debe ser un año de acción climática en todos los niveles. Inspirándose en los miles de estudiantes de todo el mundo que demandan una acción tangible, hizo un llamado a los líderes mundiales para que, en el último año, aumenten las emisiones de carbono debido a las actividades humanas. Para lograr estos objetivos, las personas de todo el mundo deben cambiar sus patrones de consumo, dijo, y señaló que cada año se desperdician 1.300 millones de toneladas de alimentos, ya que unos 2.000 millones de personas padecen hambre y malnutrición.