En Japón es muy sencillo encontrar una oreja para quejarse, en ese país encontramos una empresa que se ofrece a escuchar los lamentos y las críticas de los demás. El pago es de 10 dólares por hora.
Takanobu Nichimoto, un asesor de moda con 50 años, inició el servicio en línea llamado “Ossan Rental” en Tokio en 2012.
Ossan tiene un ssignificado despectivo para “tíos” u hombres de mediana edad en Japón, a diferencia de la terapia real en la que buscas ayuda en las clínicas, con este servicio solo le pagas a una persona para que sea como la tía o el tío que están para escucharte.
Si te deseas realizar este trabajo, puedes recibir 10 dólares por hora, solo escuchas los problemas, dando consejos y siendo un acompañante.
Para ser un Ossan, los solicitantes son primero evaluados por asegurarse de que no seas demasiado positivo, que es un rasgo que no les gusta a muchas personas de Nishimoto ya que no les gusta, y también están sujetos a una verificación de antecedentes penales obligartorios.
Ossans tampoco tiene permitido tener una relación física con los clientes o tener algún tipo de tocamiento.
El sitio web recibe 900 reservas al mes.
