Su nombre es Iván Mejía Ramirez y ha mezclado sus dos pasiones (El chocolate y la artesanía) para dar a conocer las diversas maravillas que el Perú tiene.
“Como artista siempre quise crear una oferta diferente, fue entonces que decidí promover la cultura peruana y el cacao chuncho cusqueño a través de esculturas de chocolate, generando así mayor impacto social y económico”, afirmó Iván Mejía para el diario “El Comercio”.
Este Cusqueño llevó su talento al mundo empresarial, formando Kontiti, una empresa que brinda chocolates con figuras tradicionales peruanas. Así los viajeros pueden llevarse maravillosos y deliciosos recuerdos de su visita a Perú.
“Los productos que más vendemos son el Machu Picchu en 3D, también las llamas y cuyes de chocolates, a los niños les fascina”, puntualizó.
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